y el súbito vuelo
el graznido
el pico abierto
no sé que profundo asombro fascinante
se rompe sobre mi alma
¡es su armonía salvaje!
el halcón de mi bosque
en este verde espacio que es casi mío
vino a quedarse...
La belleza es verdad; la verdad, belleza.
Esto es cuanto sabréis sobre la tierra,
y cuanto necesitáis saber.
John Keats
El halcón moteado se abalanza y me acusa, denuncia mi charla y mi holgazanería.
También yo soy poco dócil, y también intraducible;
lanzo mi bárbaro graznido sobre los tejados del mundo.
La última niebla del día se detiene por mí,
lleva mi imagen tras las otras, tan real como las demás en los sombríos bosques,
me atrae a la bruma y la oscuridad.
Me voy como el aire, agito mis blancos cabellos al sol que huye,
esparzo mi carne en remolinos y la arrastro en retorcidos jirones.
Me lego a mí mismo al barro para crecer de la hierba que amo;
si me necesitas de nuevo, búscame bajo las suelas de tus botas.
Difícilmente sabrás quién soy o qué me propongo,
pero seré bueno para tu salud sin embargo,
y purificaré y fortaleceré tu sangre.
Si al principio fracasas al buscarme mantén tu ánimo,
si no me encuentras en un sitio mira en otro;
en algún lugar me detendré a esperarte.
Walt Whitman (1819-1892)
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